SOBREVUELA LA SOSPECHA DE QUE NO FUERON ELLOS: dos agentes de la Policía Local son condenados. La historia se repite.

Dos Policías Locales de La Línea de la Concepción fueron condenados, hace 4 años, a penas privativas de libertad y de inhabilitación absoluta para ejercer cargo público, por ello ingresaron en prisión y perdieron, de por vida, la condición de funcionarios. El delito del que se les acusó fue el de detención ilegal. Nadie duda de la gravedad del delito, máxime cuando se comete por un funcionario público policial. Las pruebas presentadas y admitidas en la vista del juicio oral fueron suficientes para condenar a los agentes; al menos, así lo consideró la Sección algecireña de la Audiencia Provincial de Cádiz. Con los “ingredientes” (pruebas) que recibieron los “cocineros” (magistrados que componían el Tribunal)…tuvieron que hacer ese pastel. Creo que no tuvieron otra opción. No pienso, como otros, que existiera ánimo especial de condenar.

En aquel caso, y también en el que tocaremos más abajo, se sospechaba que al menos uno de los condenados era inocente. Algunos creían estar en la certeza de esa creencia. Hubo quien -también a día de hoy- se atrevió a poner nombre y apellidos a quien debió ser condenado en nombre de quien, finalmente, recibió el castigo. Sinceramente, yo NO tengo datos en ese sentido.

Como decía antes, el delito de detención ilegal es un delito muy grave siempre, máxime si llega de la mano de un Policía. No obstante, y no voy a tratar de justificar nada, daré unas pinceladas sobre el denunciante y víctima, según la Justicia, de tal detención ilegal.

El ciudadano que presentó la denuncia recibía, desde los años 70 del siglo XX, un alías policial afamado en la toda la Comarca. Era un delincuente de mucho cuidado. En realidad sigue siéndolo. Ese ciudadano, NO contribuyente, era un “pobre enfermo” adicto a la heroína y otras sustancias estupefacientes prohibidas, y lo era –sigue siéndolo- desde hacía casi 40 años. Para colmo, en su ficha policial constan, según se dice, más de 70 detenciones y numerosos ingresos en prisión por los más variados tipos penales del vigente Código Penal, y de otros. Se rumorea que estuvo detenido hasta por delitos contra la libertad sexual de menores de edad… ¡es un rumor!

Según dicen, sustracción de vehículos, robos con fuerza, robos con violencia e intimidación, tráfico de drogas, resistencia y atentado a los agentes de la autoridad, malos tratos, falsedad, lesiones, etc.…son algunos de los tipos penales más reseñados en su ficha policial.

El día de autos, según parece, este ilustre sujeto se encontraba en el recinto ferial, y era hora y día punta de la fiesta grande de la localidad. Según algunos ciudadanos, había tratado de sustraer dinero a unos inocentes y desprotegidos muchachos. La sentencia condenatoria dice que los dos agentes, sin mediar motivo legal alguno, introdujeron al ciudadano “alias” en un coche policial y lo abandonaron, a altas horas de la noche, en una pedanía. Allí, y antes del regreso a la urbe, los agentes parece que le propinaron algunos golpes que no pasaron de producir lesiones MUY leves. A este respecto, con mala intención se habló, durante años, de paliza y lesiones graves.

Hoy han pasado años desde que se produjeron los hechos, y otros tantos años desde la triste “pérdida” de esos dos compañeros. Ambos eran muy trabajadores y comprometidos en la labor policial.

Ahora se repite la historia. No solo existe una nueva acusación y condena judicial desde el mismo órgano jurisdiccional, sino que además es por idéntico delito. Para más coincidencia, estos nuevos hechos se producen otra vez en fechas de feria de La Línea y en el recinto de la misma. Naturalmente, volvemos a hablar de agentes del mismo Cuerpo de Policía Local. Pero todavía hay más: se repite la velada sombra de supuestos autores NO condenados que han consentido, y permitido, la condena de los que venían siendo acusados.

Ahora hay algo más respecto a las sospechas de que los acusados eran inocentes. En Sala de Vistas se pudieron oír las voces grabadas de dos agentes de policía que, ante el Jefe del Cuerpo, admitían ser los autores de los hechos que iban a condenar, a la postre, a dos agentes inocentes. Las voces que se oían en las grabaciones fueron reconocidas por los presentes, y el Jefe del Cuerpo acudía al plenario en calidad de testigo. Este Jefe, ante los presentes, no reconoció su voz y la de sus interlocutores, pero recordó, in situ, la conversación y el sentido de la misma. De algún modo, se doy por buena la conversación mantenida años atrás y que, lamentablemente, fue obtenida sin control judicial.

Los presuntos autores del delito reconocido en grabación no admitida como prueba, lo negaron todo ante el Tribunal. Durante la audición de la cinta grabada se pudo oír, a los interfectos, el modo en el que admitían ser los autores del delito y como se comprometían a “dar la cara” llegado el momento. Al final nada: los acusados han sido condenados. Ninguno dio la cara.

Ahora, por suerte para todos, solo uno de los acusados perderá su condición de funcionario público, y además NO ingresará en prisión. Solo este funcionario ha sido finalmente condenado por el grave delito de detención ilegal. El otro agente lo ha sido por otro delito de menos gravedad y sin serle impuestas penas severas. En este segundo caso estamos como en el primero: un Policía convencido, comprometido, trabajador, formado y vocacional, será apartado del servicio de por vida. La ciudad y el Cuerpo pierden a un buen “pastor”. Este agente, como los que ya fueron defenestrados años atrás, posee en su haber un gran número de detenciones por tráfico de drogas, robos y otros tipos penales. Algunos de sus servicios son de los que no se olvidarán jamás por su calidad e interés policial. Fino olfato policial es el que tiene mi amigo y siempre compañero.

La historia se repite: una a familia destrozada; una vida arruinada; mil ilusiones a la basura. Un daño irreparable para un inocente declarado culpable.

Don Rodrigo.

Comentarios

  1. Manda huevos. La vida de dos policias que se habran jugado la vida en incontables ocasiones, tirada al retrete por la manifestacion de un delincuente desalmado. No se puede esperar menos de un pais tan garantista y desagradecido como el que vivimos; España. Asi nos va.
    Un saludo.

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  2. GRACIAS POR EL COMENTARIO MARIO, pero creo que no has entendido el sentido del artículo: no se trata de que un malvado delincuente denuncie algo, tiene derecho a ello aunque finalmente se condene a los agentes. Además, parece que el delito se cometió contra él, que por muy cerdo que sea, tiene derechos. España es un estado de derecho.

    El texto va por otro sitio. Alguien ha dejado que unos compañeros sean condenados, y pierdan sus placas, sin ser autores del delito. Por eso se titula así el artículo: la sospecha de que ellos no fueron. Muchos saben, o creen saber, que los polis que realmente cometieron el ilícito fueron otros. El Juez, aunque suene raro, tuvo que condenar a los acusados, pruebas erróneas los implicaban, aunque otras pruebas, NO ADMITIDAS, demostraban que otros agentes, no acusados, podrían ser lo verdaderos culpables.

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  3. Entendi el sentido Ernesto, me refiero a que las manifestaciones de un delincuente, en el 99.9 por ciento de los casos son falaces, y a no ser que existan pruebas incriminatorias que generen un veredicto de culpabilidad claro y justo, estamos hablando de falso garantismo; se trate de los agentes condenados o no. Si ademas pagan justos por pecadores pues apaga y vamonos.
    Un saludo.

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  4. Hola a todos,como dice aqui el amigo MARIO,vivimos en un sistema democratico y demasiado GARANTISTA,idependientemente de quien cometiera el delito(que mandan narices tener compañeros asi,que dejan que unos compañeros de profesion carguen con un delito que han cometido ellos,perdon pero eso es de cobardes)si uno la a cagado uno se responsabiliza de sus actos,asi almenos lo veo yo,soy futuro vigilante de seguridad y exmilitar,antes me muero que echarle la culpa de nada y menos aun de un delito aun compañero que problablemente me a salvado la vida en algun momento,si soy yo quien a cometido ese delito,uno es hombre para lo bueno y lo malo,pero mas detestable me parece el echo de que un tribunal juzgue a alguien teniendo pruebas de su inocencia y pruebas de culpabilidad,y que hay de la duda razonable,sigo pensado que en este pais nuestro tiene mas valor los derechos de los delincuentes que los de cualquir ciudadano que paga sus impuestos o los de un agente de la autoridad,que estan para protegernos de estos desgaciados,mucho han de cambiar las leyes en este pais,un saludo y buen servicio.

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  5. Hola Traiti:

    Agradezco tu comentario, pero no hay que cargar las tintas contra el Tribunal. Estoy seguro de que si esa grabación la presentará un delincuente en contra de un policía, los magistrados tampoco la hubieran podido admitir. La grabación era ilegal, (aunque muy reveladora) y por ello no sirve como prueba. Eso sí, demuestra, no legalmente, que esos acusados son inocentes realmente, pero el sistema judicial es el que es, y una prueba obtenida alegalmente NO puede ser tenida en cuenta.

    Ya ves: todo esto lo dice un amigo y compañero de los condenados. Pero las cosas son las que son. Son las reglas del juego y toca joderse.

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  6. Hola amigo Ernesto,si,las pruevas no son legales pero demuestran que existe una duda razonable,saben que estan condenando a unos inocentes,entonces ¿que es lo que nos diferencia de una republica bananera?,son conscientes de que los inputados son inocentes,por que no declaran el juicio nulo,para que queremos las leyes si sabiendo que hay indicios de inocencia nos declaran culpables,donde esta la democracia,nos juzgan a dedo,quien es mas culpable,los imputados o los jueces que a sabiendas de la mas que probable inocencia los declaran culpables,esto debe cambiar,donde radica el limite de la legalidad de las pruebas,son alegales por que fueron recojidas sin el consentimiento de los implicados,si no confesaron cuando imputaban a sus compañeros menos lo haran despues,es que si el jefe de la unidad les hubiese preguntado si podia grabar la combersacion,es ridiculo,en fin compañeros,desde aqui quiero mandaros todo mi apoyo y animo,que seguro no va a cambiar nada pero no puedo hacer otra cosa por vosotros,un saludo y buen servicio.

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  7. El problema real es que hay mucho compañero guarrete, ese que pega una hostia a un detenido que no es suyo ect.., y que luego se esconde despues de dejarle el muerto a otro. Los conocemos sabemos que existen y no siempre les hacemos cara. recientemente e tenido un supuesto como el que describo y al obligarle a escribir y no dejar que se vaya de rositas el señor me ha retirado la palabra, pues no sabe lo agusto que me he quedado. Suerte al compañero condenado. Jose MORENO

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  8. Gracias por tu comentario José Moreno. He leído el email que me mandas respecto a tu tío el de la promoción del 74. Esa época la viví como niño hijo del cuerpo. Recuerdo los telediarios e Informe Semanal (todos los sábados)...siempre eran muertos y más muertos: asfalto manchado de sangre y tricornios y gorras tiradas sobre esos charcos rojos...

    Desde niño, muy niño, ya me atraía todo eso y por ello, sin entender nada, veía los noticieros de TV. Me marcó para toda la vida.

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  9. Hola Traiti, te responderé con gusto y espero que con acierto jurídico.

    El Estado de Derecho es así, para lo bueno y para lo malo: se cumple con lo establecido en el ordenamiento jurídico (conjunto de normas judiciales del país). Efectivamente, estoy seguro de que los magistrados que compone el tribunal de la Audiencia (tres magistrados) sabe que esas personas NO son los autores materiales del hecho, pero tienen que seguir con lo que hay. Aportar pruebas y que estas sean o no admitidas, o sea, averiguar, indagar o investigar, solo se puede hacer en el periodo de Diligencias Previas y estas acabaron. Cuando se finalizan las D. Previas se está listo para ir a juicio o para archivar la causa por no hallarse, durante la investigación y periodos de aportación de pruebas, indicios reales de delito. En este caso había indicios de delito contra los acusados y se tuvo que ir a juicio.

    Para ese delito, casi siempre, se imponen además de la pena de inhabilitación impuesta al compañero, otra de privación de libertad por más de 2 años. En este caso el compañero ha sido condenado a lo justo para no ir a la cárcel: 2 años. Creo que eso fue una buena intención del tribunal. Seguramente no han podido hacer más. Por ese mismo delito, hace 4 años, dos compañeros, de la misma plantilla, NO solo perdieron la placa sino que fueron a prisión más de tres años.

    En este caso, el nuevo agente condenado no irá a prisión pero JAMÁS volverá a ser funcionario de ninguna clase. En el fondo, y aunque suene a coña, el tribunal se ha portado muy bien.

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  10. Hola Ernesto,ya se que el ordenamiento juridico es el que es,pero coj....no deja de ser una injusticia,si no entrara en prision pero ya tiene un antecedente penal,por cualquier pequeño delito que cometa,de seguridad vial por ejemplo,puede acabar en la trena por tener antecedentes penales,y me pregunto,si sabeis quien son los cobardes que han metido en este lio a los compañeros,como les podeis mirar a la cara,yo no podria,imagino que me lo ponen de compañero en una patrulla y me niego hacer la patrulla con el,que me sancionen pero con semejantes sujetos no voy ni a cojer dinero,no soporto a los cobardes,me dan alergia y ASCO,bajo mi punto de vista son seres despreciables,quiza por que desde muy pequeño decidi no perder algo tan valioso como es el HONOR,LA PALABRA DADA,EL SER FIEL A LA VERDAD,son cualidades que cada dia cuesta mas encontrar en el ser humano,una lastima que las personas integras y honradas somos un especie en extincion,un saludo y buen servicio.

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  11. Según parece, algunos policías no miran a la cara a esas personas, pero yo llevo años viendo muchas cosas y, en principio, no me voy a meter, a saco, en guerras que no son mías. Uno de los presuntos sospechosos de poner voz a la declaración reconocimiento de culpa -grabación no admitida legalmente- ya no es policía. Dejó de ser agente hace dos años, quizá más. Las causas de su expulsíón del cuerpo son administrativas: siendo policía en calidad de interino, no superó las pruebas físicas para adquirir la condición de funcionario, por ello...a la calle.

    Amigo, gracias por seguir leyendo aquí.

    Veritas Vincit

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